Aceite de oliva virgen – 50 cc.
Ajos – 2 dientes.
Caldo de pollo o pato – 1 litro.
Cebolla – 3 unidades.
Guindilla – 2 unidades.
Harina – 2 cucharadas.
Mantequilla – 50 grs.
Pato – uno de dos o tres kilos.
Pimentón – 2 cucharadas (picante).
Pimienta negra molida – 3 cucharadas.
Tomate – 4 que estén maduros.
Vino tinto – 1 vaso.
Elaboración
Limpiamos bien el pato, lo atamos con un hilo y lo freímos en una cazuela con el aceite y la mantequilla hasta que tenga un bonito y uniforme color dorado. Lo sacamos de la cazuela y lo reservamos. Picamos la cebolla y los ajos y los rehogamos suavemente hasta que se doren. Añadimos los tomates maduros rallados, el pimentón picante, la harina y sofreímos unos minutos.
Agregamos el vino tinto y dejamos cocer 5 minutos.
Adobamos el pato con la pimienta negra molida y lo colocamos otra vez en la cazuela añadiendo el caldo. Tapamos bien la cazuela y dejamos cocer durante una hora y cuarto o hasta que el pato este tierno. Finalmente sacamos el pato de la cazuela, trituramos la salsa y volvemos a ponerla en la cazuela junto con el pato ya troceado. Cocinamos unos minutos más y servimos bien caliente con arroz blanco, pasta o patatas fritas como guarnición.